Ayer me subí a un ómnibus y vi algo que hacía muchísimo tiempo no veía: caras de felicidad. Después fui a la verdulería, al supermercado y algo se repetía: sonrisas que acompañaban discusiones de fútbol.
Infobae.com |
El presente de ambos equipos es asombroso –y se nota en la calle-. Nacional lleva nueve victorias consecutivas, siete por el campeonato y dos por la Libertadores. Peñarol ganó los últimos ocho de los nueve partidos que disputó. Y el ómnibus me pasó en hora.
Por primera vez desde la temporada 2001-2002, los “grandes” marchan solos en la primera posición, a varios puntos de ventaja de los demás. Después de mucho tiempo, se está viviendo un campeonato como los de antes. Al igual que el de España – donde Barcelona y Real Madrid juegan un campeonato paralelo al resto-, el torneo se definirá entre dos equipos. Por su parte, mi profesor de literatura me dio el punto que me faltaba para salvar la prueba.
¡Qué campeonato aburrido!, coinciden la mayoría de los periodistas especializados. Ganan los grandes, y los demás equipos son espectadores de lujo. Sin embargo, debo reconocer que me parece uno de los campeonatos más atractivos de los últimos años.
No digo esto porquemientras los dos grandes sigan ganando, el 90% de los uruguayos seguirán expectantes de cómo será el desenlace del campeonato. Ni porque gracias al presente de ambos equipos, las hinchadas realizan verdaderas fiestas en cada partido.
Mi verdadero motivo afirmar esto es que cuando los equipos más populares del país están bien, el pueblo futbolero está contento. Y nosotros, el resto de la sociedad uruguaya, gozamos de los beneficios que esto trae: verdura gratis, ómnibus en hora, caras sonrientes, profesores tolerantes.
Por lo tanto, no me parece tan negativo ni aburrido que, al menos, una vez cada diez años, los grandes anden bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario